Las bombas de energía solar se conectan a los paneles solares y proporcionan más agua cuanta más radiación solar reciban, lo que es muy interesante en las instalaciones de riego. Son una opción muy atractiva para conseguir agua en lugares remotos como cabañas o casas rodantes. Algunas personas las utilizan para la irrigación por goteo y para regar los jardines de sus casas. A pesar de ser un sistema que lleva muchos años en el mercado, no se ha comenzado a utilizar de manera notable hasta hace poco, cuando la gente ha comenzado a concienciarse sobre los beneficios de la utilización de la energía solar.
Las bombas de energía solar tienen una gran ventaja sobre las bombas de agua tradicionales, ya que utilizan la energía de manera gratuita. Pese a ello, cuentan con una gran desventaja: La energía solar sólo está disponible durante el día, aunque es cierto que la energía obtenida puede almacenarse en una batería para su posterior utilización. Las bombas solares suelen agruparse en dos categorías:
- Bombas de superficie: se usan generalmente para mover el agua de un lugar a otro, algunas están diseñadas para lograr grandes presiones, mientras que otras tienen como principal objetivo mover grandes volúmenes de agua a baja presión. Algunas personas utilizan estas bombas para conseguir mayor presión en el sistema de agua de sus casas.
- Bombas sumergibles: se usan para sacar agua de los pozos más profundos, ya que pueden meterse dentro del pozo y bajar o subir dependiendo de la profundidad del mismo.
Estas bombas de energía solar generan también un ahorro considerable en los hogares donde se instalan, tanto económicamente como de energéticamente. Las hay de diferentes tamaños, dependiendo de la capacidad de almacenamiento que se quiera conseguir.