Los paneles solares híbridos son unos paneles o colectores solares que integran la generación de energía fotovoltaica y la energía térmica en un solo panel. Los paneles solares híbridos tienen dos aplicaciones principales:
- Se instala en edificaciones, ya sea sobre cubiertas de naves industriales, suelos o cubiertas de edificios. Puede producir energía eléctrica de forma mucho más eficiente que los módulos convencionales, incrementando además su eficacia al menos en un 15%. También puede calentar, al mismo tiempo y en el mismo espacio, agua para usos sanitarios, industriales, piscinas o calefacción.
- Si se instala en huertos solares o en centrales, se incrementa la producción eléctrica en más de un 15%, de manera que consigue un rendimiento que en otro tiempo parecía inalcanzable. En este caso, el panel híbrido se usa como Módulo Fotovoltaico Refrigerado, con lo que la energía térmica que se obtiene puede aprovecharse o sacarla al exterior por medio de disipadores de calor.
Los paneles solares híbridos se componen de células fotovoltaicas de silicio que se colocan en un absorbedor laberíntico para conseguir un módulo compacto con entrada y salida para fluido calorportador y una caja de conexiones para el cableado eléctrico.
Las ventajas de los paneles solares híbridos son muchas, entre las que se pueden destacar:
- Aumento de la potencia fotovoltaica en casi un 15%
- Calentamiento del agua para diversos usos
- Reducción del espacio necesario para instalar energía fototérmica y fotovoltaica
- Prolongación de la vida útil de los módulos empleados al reducirse la temperatura de su trabajo
- Reduce los costes para la producción e instalación de estos sistemas
- En las centrales solares se obtiene un mayor rendimiento y una reducción del tiempo de amortización
- Tiene un impacto ambiental muy bajo
- Cuenta con menos herrajes y puntos de anclaje que otros paneles
- Su diseño es mucho más bonito arquitectónicamente